¡Cuán triste vida!, la que anida en mí.
Mas es la señora tan inhumana
Que siempre te ofrece para mañana
La condena a muerte dictada allí.
Rápida vuela como el colibrí
El tañir no cesa de la campana
Presagia una cámara, muy cercana,
En otro hospedaje distinto al de aquí.
Única ocasión que se nos ofrece
Viento perseguimos ¿a dónde vamos?
Y día tras día la duda crece.
El precipicio por donde bajamos,
A ese lugar en que siempre atardece,
Unas voces callan, os esperamossssss.
Juan Carlos
Mas es la señora tan inhumana
Que siempre te ofrece para mañana
La condena a muerte dictada allí.
Rápida vuela como el colibrí
El tañir no cesa de la campana
Presagia una cámara, muy cercana,
En otro hospedaje distinto al de aquí.
Única ocasión que se nos ofrece
Viento perseguimos ¿a dónde vamos?
Y día tras día la duda crece.
El precipicio por donde bajamos,
A ese lugar en que siempre atardece,
Unas voces callan, os esperamossssss.
Juan Carlos
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